En el mundo laboral, es común que las empresas y empleadores soliciten información sobre los antecedentes laborales de los candidatos a un puesto de trabajo.
Sin embargo, ¿qué ocurre cuando una persona solicita la vida laboral de otra sin su consentimiento? ¿Es esta acción considerada un delito?
En este artículo, se abordará esta cuestión para despejar dudas sobre las posibles implicaciones legales de solicitar la vida laboral de otra persona sin su autorización.
Se examinarán los aspectos legales relevantes para entender si esta práctica es ilegal y cuáles son las consecuencias legales que pueden derivar de ella. ¡Sigue leyendo para saber más!
¿Es delito solicitar la vida laboral de otra persona?
Solicitar la vida laboral de otra persona sin su consentimiento puede constituir un delito.
En España, el acceso a la vida laboral de un individuo está regulado por la Ley de Protección de Datos Personales y garantía de los derechos digitales.
Según esta ley, los datos personales, incluyendo los relacionados con la vida laboral, son propiedad exclusiva de la persona a la que pertenecen.
Por lo tanto, si alguien solicita la vida laboral de otra persona sin su consentimiento, puede estar vulnerando su derecho a la privacidad y protección de datos personales.
Además, esta acción puede ser considerada un delito de intrusión ilegítima en el ámbito privado de la persona, y en consecuencia, la persona que lo haya cometido puede enfrentar sanciones económicas y penales.
En resumen, es importante recordar que la vida laboral de una persona es su información personal, y, por lo tanto, solo debe ser accedida por terceros con el consentimiento explícito del titular de dicha información.
¿Quién puede pedirte la vida laboral?
En España, cualquier persona tiene derecho a solicitar su propia vida laboral a través de la sede electrónica de la Seguridad Social.
Sin embargo, en lo que respecta a la solicitud de la vida laboral de otra persona, la Ley de Protección de Datos Personales establece que solo pueden acceder a dicha información aquellas personas o entidades que estén autorizadas legalmente o cuenten con el consentimiento explícito del titular de los datos.
En el ámbito laboral, las empresas y empleadores pueden solicitar la vida laboral de un candidato a un puesto de trabajo como parte del proceso de selección.
También pueden acceder a la vida laboral de sus empleados con el fin de gestionar su relación laboral y cumplir con las obligaciones fiscales y de seguridad social.
Otras entidades autorizadas para solicitar la vida laboral de un individuo son las autoridades públicas, como la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, los juzgados y tribunales en el marco de un proceso judicial o los abogados que representen al titular de los datos.
En resumen, solo aquellos que estén legalmente autorizados o cuenten con el consentimiento explícito del titular de los datos pueden solicitar la vida laboral de otra persona.
¿Cómo conseguir la vida laboral de una persona?
En España, la manera más sencilla y rápida de obtener la vida laboral de una persona es a través de la sede electrónica de la Seguridad Social.
Para ello, es necesario disponer de un certificado digital o DNI electrónico y acceder al servicio de “Vida laboral y bases de cotización” que se encuentra dentro del apartado “Tu Seguridad Social”.
Una vez dentro del servicio, se deberá identificar a la persona cuya vida laboral se desea obtener, seleccionando la opción correspondiente.
A continuación, se deberá seguir los pasos indicados por la plataforma para descargar el documento.
Es importante destacar que, si se desea solicitar la vida laboral de otra persona, es necesario contar con su consentimiento explícito o estar legalmente autorizado para hacerlo.
En caso contrario, se podría estar incurriendo en una infracción a la Ley de Protección de Datos Personales, lo que podría acarrear sanciones económicas y penales.
En definitiva, para obtener la vida laboral de una persona de manera legal, se deberá hacer uso de los canales oficiales establecidos por la Seguridad Social y contar con la autorización o consentimiento de la persona titular de los datos.